lunes, 23 de mayo de 2016

ELASTICA

Encontrarse a sí mismo a través de la música era el mayor placer del que podía disfrutar aún siendo todo un absoluto mierdero a su alrededor. Tras cada canción había una historia real o imaginaria que ayudaba a que el "infinito abanico de posibilidades" del que hablaban los ilustrados en temas de superación personal apareciera y se abriera como la cola de un pavo real para llenar de color y brillo la tenue realidad de la que apenas pendía. Dentro de ese "abanico" cabía también la posibilidad de que en algún lugar estuviera él mismo oyendo la canción siguiente de la lista sin aún descubrirla en este momento. La sola idea de que hubiera un reflejo suyo que hubiera ya cobrado vida hacía mucho tiempo le llenaba la cabeza de ilusiones pues al fin de cuentas nunca podría desprenderse de quién era o será en el amplio pentagrama de melodías que solo flotaban por ahí buscando frecuencias de onda para dispararse hacía muy adentro de la cabeza de alguien lo suficientemente somnoliento como para dejarlas entrar sin oponer ninguna resistencia.

lunes, 15 de febrero de 2016

Sharp

Esta vez no había a dónde huir. El camino había llegado a una glorieta de la que no era sencillo escapar a menos que redujera la velocidad. Recordó que el pedal del embrague estaba aún averiado desde las últimas vacaciones pero haberlo arreglado en ese momento habría significado el fin del viaje. Decidió seguir adelante a toda velocidad hasta donde la muerte no pudiera extender sus garras y por un buen tiempo pudo mantenerse a distancia pero entonces llegó la maldita glorieta para recordarle que nunca había escapatoria y que por mucho que quisiera alejarse de su destino este siempre lo alcanzaría haciendo de su fugaz recorrido una tragedia que comenzaba justo ahí donde él creía que ya terminaba. Soltó su cinturón de seguridad y se dejó llevar por la curva hasta que ambos desaparecieron irremediablemente.